Este es un lugar muy paseado por D. Paco cuando volvía a la ciudad. Un cruce que conocía al dedillo Lucas, que lo atravesaba a pie o en su carricoche, casi siempre con prisas, ya que arriba estaba la tienda y abajo el casino, el ayuntamiento... su hermano y sus amigos. Y un punto de la ruta en el que se puede ir en varias direcciones, y todas son interesantes.
Pero antes de entrar en el corazón de la ciudad merece la pena detenerse a mirar Tarazona desde arriba y entenderla así, como una escenografía llena de vida que va cambiando. La Catedral nueva, la única mudéjar que hay en España, el río Queiles y la importancia del agua en la historia y en la economía de la ciudad o la antigua plaza de toros, BIC, que compartía usos taurinos –se alquilaban los balcones para las fiestas- con su carácter de viviendas el resto del año.